Ricardo Matheus

“Un grupo de oficiales superiores a mi rango, intentaron sobornarme para que le suministrara información sobre varios expedientes administrativos de manera ilegal, sin respetar la cadena de mando, y al negarme a facilitar el acceso, me convertí en su enemigo; en ese momento juraron el fin de mi carrera como oficial de la Armada venezolana”. Así lo expresó ayer en la mañana el capitán de Navío José Ignacio Plaza López, al comunicarse desde su exilio en los Estados Unidos con el programa matutino “La Entrevista”, moderado en Radio Caracas TV por el periodista Miguel Angel Rodríguez. Aseguró que el entonces capitán de Navío Armando Laguna Laguna, ahora vicealmirante, comandante de las Fuerzas Navales y Carlos Molero Bellavia, con el mismo rango, y ahora también ascendido a vicealmirante, con el cargo de jefe de Inteligencia de las Fuerzas Navales, “eran los interesados en violentar la cadena de mando en busca de ciertos expedientes administrativos. Este último ha encabezado los allanamientos en contra de familiares cercanos, y detuvo a mi suegro, quien es odontólogo con muchos años al servicio del Cuerpo de Bomberos Metropolitanos”. No explicó el oficial ahora exiliado el contenido de los expedientes solicitados, ni el motivo que tenían para buscar ese tipo de información a espaldas del almirante Orlando Maniglia, quien era comandante de la Armada. Al continuar la entrevista apuntó que sus superiores le pasaron factura por haberlos denunciados en su oportunidad.

En la última parte de la entrevista, el capitán José Ignacio Plaza López, destacó que conoce de cerca a los otros oficiales señalados como traidores a la patria, pero no sabe dónde se encuentran. No tienen comunicación desde hace tiempo, y tampoco la tiene con el capitán norteamericano John Correa. Presume que la persecución contra estos oficiales es producto de alguna retaliación. Ellos son oficiales bien preparados e inteligentes. Han ocupado los primeros lugares en sus promociones. Han sido críticos con el ambiente que reina en las Fuerzas Armadas y por eso los persiguen y los amedrentan, como única forma de salir de ellos. Por esa misma vía han salido otros destacados oficiales. Debieron marcharse hacia otros países en busca de nuevas alternativas de vida, al sentirse acosados por los mediocres que ocupan cargos de liderazgo dentro de la Armada.

Enfatizó también en el programa televisivo “La Entrevista”, que conoce al capitán John Correa, igual que otros oficiales que han cursado estudios superiores en los Estados Unidos. Recordó que el contacto entre ambos fue siempre profesional y amistoso por el cargo que Correa desempeñaba en la embajada americana, siempre hablaba con oficiales de la Armada venezolana. Más adelante indicó que se residenció en los Estados Unidos, porque entre los años 2003 y el 2005 hizo una serie de denuncias que nunca fueron procesadas. En esas denuncias están vinculados el actual comandante de la Armada, vicealmirante Armando Laguna Laguna, el vicealmirante Selsel Malpica y el vicealmirante Molero Bellavia. Aunque la denuncia fue consignada ante la superioridad, estos jefes fueron premiados con ascensos, los ratificaron y los colocaron en mejores cargos.

El capitán José Ignacio Plaza López dio a conocer que buscó protección en EUA antes de haber surgido las acusaciones. Tiene pruebas de todo lo que dice. Se instaló fuera del país hace más de un año después de haber pedido la baja. Trataron de amedrentarlo. El 11 de marzo del 2003 su esposa y su hija fueron secuestradas por funcionarios de la Dirección de Inteligencia Militar. Las denuncias fueron entregadas el almirante Orlando Maniglia, comandante de la Armada en ese momento.

DESERTORES

Por otras fuentes se conoció que otros oficiales de la Armada señalados como traidores a la patria desertaron de la naval. Sólo se entregó el capitán de Fragata, Francisco Moreno González. Son solicitados los capitanes de Navío Ernesto Carrasquero Mariño, quien se desempeñaba como jefe de Relaciones Públicas, el piloto naval José Santín Puerta, Bernardo Jurado Capechi, hijo del almirante Bernardo Jurado Toro. El capitán de Corbeta Jorge Rodríguez Vásquez, el teniente de Navío Ferrer Mollejas, además del resto del grupo acusado.

E-MAIL

El presidente Chávez dijo que la acusación de traición a la patria, se basa en los mensajes incautados por el servicio de inteligencia, donde el capitán José Ignacio Plaza López le dice al capitán americano John Correa el lunes 17 de enero del 2005: “por ahí viene la operación Armada Soberana. Más o menos lo mismo que la otra. Cuando tenga los detalles te los envío”. Incluías las claves de operación utilizadas por los oficiales de los barcos.
Otro correo de octubre del mismo año dice: “hola how are you. ¿Cómo está todo? En relación a los patrulleros esa es la propuesta española. Hay un grupo de oficiales trabajando en eso. Cuando esté lista la nuestra te la mando. Algunas pruebitas”.